
¿Cuántas veces has deseado cerrar los ojos y que tu mente se quedase completamente en blanco? Si ahora lo estás pensando, quizás hayan sido varias. Y sí, dicen que es totalmente imposible. Nuestra mente va mucho más allá de nuestro control. Es ella la que controla todos y cada uno de nuestros pensamientos, nuestros sentimientos, nuestras emociones... A veces luchar contra ella es como enfrentarse a una partida de ajedrez contra el mejor jugador del mundo, pero sin tener ni idea de lo que es un alfil o un peón. Es un fracaso totalmente predecible. Pero la vida es una montaña rusa de esas que tanto miedo nos dan a algunos. Primero puedes notar que estás en lo más alto, que tienes el control de absolutamente todo pero de repente, algo se desvanece y te caes en picado, sin frenos, sin capacidad de retroceder. Y eso es la vida. Subidas y bajadas, continuas, algunas más persistentes que las otras. Pero cuando estás abajo, cuando no eres capaz de volver a subir es cuando pruebas a cerrar los ojos y deseas que todo sea una simple pesadilla.
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